Escuela Normal Superior El Jardín de Risaralda
Nodo Eje Cafetero
Reconozco que no estaba preparada para educar a quien no veo, siempre me ha parecido importante leer el rostro de los estudiantes, entrar en sintonía corporal, descifrar su interés, su postura, su empatía y entusiasmo por los temas abordados. Peor cuando se planteó que no tendríamos comunicación virtual si no solo a través de las guías, decisión que se revisó a tiempo. Es cierto que ya no tenía mucho sentido seguir realizando las clases con el mismo currículo planteado antes de la crisis.
Decidí preguntarles a los estudiantes tanto del nivel de educación media, como del Programa de Formación Complementaria –es una Normal Superior-, y de la Universidad, qué preguntas o situaciones les gustaría investigar o consultar relacionadas con los cambios afrontados en este tiempo. Surgieron rápidamente temas o preguntas en torno a la resiliencia, al lugar de las familias ante el confinamiento, otras con relaciones a la construcción de la autonomía, el sedentarismo, el arte, la espiritualidad, el stress, la crianza humanizada, el fortalecimiento de los lazos afectivos, la incertidumbre, el apego, la empatía, la readaptación social, el nexo entre la esquizofrenia y el arte, la danza como herramienta cultural para liberar el alma, el arte y las barreras de aprendizaje, el bordering y el arte, la cultura lectora, el autismo y el arte; la autoestima, los trastornos alimenticios, la depresión en adolescentes, el aprendizaje autónomo, el autocontrol, la incidencia del deporte en la personalidad, la ansiedad y las relaciones intrafamiliares, el pensamiento científico en los niños, los trastornos de personalidad, las fobias, la coexistencia, la bipolaridad, la sexualidad en niños y adolescentes, la incidencia del conflicto armado en la primera infancia, la incidencia de la música sobre los estados de ánimo, y los efectos de acuerdo con los tipos de música, entre otros.
Descargar el documento para leer el texto completo.